Cineteca Nacional
(Edición de primavera)
Los catorce títulos incluyen obras de Peter Jackson, Lúcia Murat, Kiril Serebrennikov, László Nemes y un clásico de Elem Klímov
La camarista, de la cineasta mexicana Lila Avilés, primera película de la muestra
Cineteca Nacional, del 12 al 29 de abril y posteriormente recorrerá el circuito CDMX y del interior de la República
P or casi 50 años, la Muestra Internacional de Cine ha albergado trabajos trascendentes de directores emblemáticos como François Truffaut, Federico Fellini, John Huston, Woody Allen, Werner Herzog, David Lynch e incluso George Lucas, además de la obra más destacada de cineastas mexicanos clásicos como Arturo Ripstein o Felipe Cazals.
Para la edición de primavera 2019, la Muestra Internacional de Cine reúne 14 filmes provenientes de lugares como Japón, Reino Unido, Brasil o Francia, además de un clásico de la extinta Unión Soviética y, por supuesto, México. Todas las obras seleccionadas son una muestra de las distintas miradas y preocupaciones de los cineastas contemporáneos, además de dar cuenta de la maestría de sus autores.
La sexagésimo sexta Muestra Internacional de Cine tiene lugar desde el 12 al 29 de abril en el recinto de Xoco, es decir, 18 días del mejor cine del mundo. A esto se suman poco más de tres semanas de cinefilia en distintas sedes del Área Metropolitana y, posteriormente, en varias ciudades de nuestro país.
La película inaugural fue La camarista (México, 2018) de Lila Avilés, donde seguiremos de manera voyerista a Eve, la joven trabajadora de un hotel de lujo en la Ciudad de México. El filme ya ha participado, y con muy buenos resultados, en los Festivales de Morelia, Toronto y La Habana, por mencionar sólo algunos.
Con un exhaustivo trabajo de investigación y restauración, Peter Jackson logra en Jamás llegarán a viejos (Reino Unido-Nueva Zelanda, 2018) un documental vivencial y envolvente a cien años del fin de la Primera Guerra Mundial. En La casa junto al mar (Francia, 2017), el director Robert Guédiguian reflexiona sobre el paso del tiempo y la vejez junto a los actores y actrices que crecieron con su filmografía. El documental de Tom Volf, María por Callas (Francia, 2018), busca resignificar la figura de la intérprete griega con una exhaustiva búsqueda de primera voz.
El paso del escritor Ryszard Kapuściński por la Angola de la Guerra Fría es visto a través de la animación y el material de archivo en Un día más con vida (España-Polonia-Bélgica-Hungría-Alemania, 2018) dirigido por Raúl de la Fuente y Damian Nenow. En guerra (Francia, 2018), de Stéphane Brizé, llega en un momento crucial para los movimientos sociales de la Francia contemporánea, película que tuvo un gran paso por el Festival de Cannes en su estreno.
En Plaza París (Brasil-Portugal-Argentina, 2017), la directora brasileña Lucía Murat construye una intensa historia distópica que retrata los conflictos de un Río de Janeiro fracturado por la violencia. En Leto (Rusia-Francia, 2018) el controversial realizador Kirill Serebrennikov retoma un evento personal para profundizar en un escenario de rock y convulsión social de los años 80 en la entonces Unión Soviética. El filme Ocho de cada diez (México, 2018), de Sergio Umansky, recoge una estadística sobre la violencia y la impunidad en nuestro país para contar una historia de justicia por propia mano.
Con su estilo minimalista y asfixiante, László Nemes regresa a Cineteca y logra advertir en Atardecer (Hungría-Francia, 2018) un momento caótico y violento que acabaría con el sueño de la vieja Europa a inicios de Siglo XX. La boda (Bélgica-Pakistán-Luxemburgo-Francia, 2016), nuevo filme de Stephan Streker, vuelve a poner sobre la mesa los choques culturales entre el mundo occidental y oriental. El segundo largometraje de Markus Schleinzer, Angelo (Luxemburgo-Austria, 2018), ofrece una perspectiva álgida al racismo de la Europa del siglo XVII.
En la película Asako I & II: Soñar o despertar (Japón-Francia, 2018), Ryûsuke Hamaguchi se inspiró en la obra literaria Netemo sametemo de Tomoka Shibasaki donde la joven del título se enamora de dos personas idénticas con diferente personalidad en dos momentos de su vida. Finalmente, el duro punto de vista del clásico soviético, Ven y mira (URSS, 1985) de Elem Klímov, refleja las atrocidades de la Ocupación nazi en Bielorrusia y vuelve a las salas de cine en una versión restaurada.
Por otro lado, el cartel oficial, creado por el equipo de Diseño de Cineteca Nacional, explora los conceptos primarios acerca del cine. Éste plantea al movimiento como característica principal de la imagen fílmica. Usando la abstracción de una cinta de filme en movimiento se propone un recurso dinámico, colorido y con diversidad de gama tonal y aplicaciones (degradado/sólido) para representar la pluralidad de la Muestra. En este caso se resalta el nombre de la muestra por encima del número para que tenga más presencia el evento en sí y el número sea un indicador tipo folio.
La 66 Muestra Internacional de Cine se lleva a cabo del 12 al 29 de abril en la Cineteca Nacional, luego del 19 de abril al 13 de mayo se exhibirá en 21 sedes de la Ciudad de México y Área Metropolitana (seis sedes de la UNAM, dos del IPN, tres complejos Cinépolis, cinco complejos Cinemex, el IFAL, Cine Tonalá, Cinemanía Loreto, La Casa del Cine). Además, como es tradición, el evento se convierte en una fiesta nacional que recorrerá 19 sedes del interior de la República a partir del 15 de mayo y hasta el 13 de julio, comenzando por Guadalajara y Monterrey, y cerrando en la Cineteca Tamaulipas. Las sedes en la Ciudad de México y las de Circuito Cineteca suman, al menos, 40 sedes en todo el país.