La mujer que enfrentó al poder en Tebas
Teatro Julio Castillo: inicia 20 de julio al 27 de agosto
Versión y dirección a cargo de David Gaitán
Antígona un espacio para discutir sobre la justicia, la política, la vigencia de la relación con lo divino, el activismo social, la responsabilidad de quien gobierna.
A partir del texto original de Sófocles, llega al Centro Cultural del Bosque Antígona -versión y dirección de David Gaitán-, puesta en escena que pretende utilizar la ficción para hurgar en política, sociología y filosofía. Este montaje podrá disfrutarse del 20 de julio al 27 de agosto, los jueves y viernes a las 20:00 horas; sábados a las 19:00 horas; y domingos a las 18:00 horas en el Teatro Julio Castillo.
Es una producción de Teatro UNAM que relata la historia de Antígona, hija de Edipo, antiguo rey de Tebas, quien enfrenta a la autoridad política y al rey Creonte, cuestionando los preceptos morales tradicionales tras la muerte de su hermano Polinices, considerado el traidor del pueblo.
Pese al decreto que anuncia la pena de muerte a quien ose enterrar el cadáver, Antígona intenta darle sepultura bajo el argumento: “es mi deber”. Por ello es enfrentada a juicio, acontecimiento que ha obligado al pueblo de Tebas a revisitar sus ideas sobre la justicia.
La puesta en escena permite el siguiente cuestionamiento: ¿están las leyes del Estado por encima de las naturales, se nombren “ciencia”, “dios” o “herencia”?, pregunta que sigue vigente y que es observable en la sociedad contemporánea.
Al respecto el director del montaje, David Gaitán, comentó en entrevista que “la obra mantiene una aterradora vigencia. En su momento nos motivó la idea de escenificar una conversación política que aun ahora consideramos que es necesario tener; en un mundo en el que sus líderes están cargando de teatralidad sus administraciones, indagar en la complejidad de carácter y utilizar esa teatralidad para problematizar la realidad nos parece un anclaje poderoso al presente”.
La propuesta escénica es convertir al teatro en una asamblea popular donde participen tanto elenco como espectadores, y que pueda resolverse este juicio a través de la reflexión de todos los asistentes. “Se busca hacer de Antígona un espacio para discutir sobre la justicia, la política, la vigencia de la relación con lo divino, el activismo social, la responsabilidad de quien gobierna, la obligación del ciudadano frente a la opresión, la democracia, la libertad de expresión, la importancia de los actos simbólicos, el comportamiento del colectivo frente a las crisis de liderazgo… Todo esto bajo la premisa de no traicionar la complejidad de carácter propia a todo ser humano”, comentó el director.
Finalmente, David Gaitán agregó que espera que exista la voluntad de los espectadores de conversar a partir de lo que la obra propone, ya que confía en que se acercan a un evento escénico que tiene todo por revelar. “Siempre se aspira a la amplitud de mirada del espectador, ya que el espectador ideal es el que tiene tanto su sensibilidad dispuesta como su espíritu crítico alineado a su punto de vista”.