A 70 años de la partida de José Clemente Orozco

En el Munal se pueden admirar piezas del artista jalisciense como parte de la exposición XX en el XXI. Colección del Museo Nacional de Arte y en el Museo de Arte Moderno, en la muestra Territorios de la memoria 1985 – 2019
La exposición Parodi & Newbolt: una mirada a Orozco se presentará a partir del mes de diciembre en el Museo del Palacio de Bellas Artes

 

  L  a Secretaría de Cultura, a través del Instituto Nacional de Bellas Artes y Literatura, rememoran a José Clemente Orozco a 70 años de su fallecimiento. La obra de este artista jalisciense, declarada Monumento Artístico en 1959, es parte de la iconografía cultural de este país. El INBAL resguarda un destacado volumen de obras de Orozco en sus museos, así como en otros recintos del país gracias a comodatos, como es el caso del Museo Cabañas, en la ciudad de Guadalajara, entre otros.

Entre sus obras emblemáticas destacan las que adquirió el Dr. Álvar Carrillo Gil, uno de sus principales promotores, que posteriormente donó al pueblo de México con la creación del museo que lleva su nombre. Los óleos que forman parte de la serie Los Teules son un ejemplo de la potencia y riqueza de su obra, que ahora es patrimonio de todos los mexicanos.

Como parte de la celebración de su 45 aniversario, el Museo de Arte Carrillo Gil busca difundir el legado del artista con una serie de actividades que incluyen una visita el 7 de septiembre al área de registro y control de obra del museo donde un especialista hablará sobre Prometeo, un óleo de Orozco de 1944. Además, se realizarán distintas dinámicas en redes sociales donde se regalarán libros y se profundizará sobre las obras del jalisciense que resguarda este recinto. La Colección Carrillo Gil reúne algunas de las obras más emblemáticas del arte moderno entre las que figura este artista como uno de los principales núcleos. Los detalles serán difundidos por las redes sociales del museo.

La obra mural de José Clemente Orozco, que puede visitarse en el Palacio de Bellas Artes y otros recintos del Centro Histórico, es la inspiración para la exposición Parodi & Newbolt: una mirada a Orozco que se presentará a partir del mes de diciembre en el Museo del Palacio de Bellas Artes. La muestra, organizada en colaboración con el Antiguo Colegio de San Ildefonso, busca entrelazar las perspectivas y procesos creativos entre este dúo de artistas, uno de origen mexicano y el otro inglés, a través de la revisión del diálogo entre obras realizadas exprofeso por estos dos creadores, y la producción plástica del pintor jalisciense.

Esta exposición propone el debate y la reflexión en torno a los temas centrales de la obra de Clemente Orozco y su relación con el muralismo, como la crítica a la sociedad de su tiempo, la naturaleza humana y la industrialización, entre otros, temas que lo convirtieron en un artista universal. El resultado de este proceso de diálogo se materializará en pinturas, grabados y dibujos hechos específicamente para esta muestra, la cual será inaugurada en el mes de diciembre.


José Clemente Orozco (1883 – 1949) es uno de los artistas mexicanos más importantes y trascendentes de la primera mitad del siglo XX. En 1897 inició sus estudios en la Escuela de Agricultura de San Jacinto. Sin embargo, su vocación artística se desencadena rápidamente al ingresar en la Academia de San Carlos y, particularmente, como consecuencia de su gran admiración por los trabajos de José Guadalupe Posada. Durante el régimen del presidente Francisco I. Madero comenzó a realizar caricaturas políticas y series de acuarelas que ilustraban la vida de las prostitutas. En 1919 regresa a México de una estancia por Estados Unidos y se une al movimiento muralista.


En 1927 vuelve a los Estados Unidos y se establece en Nueva York durante siete años, periodo en el cual realiza importantes murales en el Pomona College de California, en el Dartmouth College y en la New School for Social Research de Nueva York, en los cuales retoma el tema de la Revolución Mexicana, así como la deshumanización de las grandes ciudades. Después de su definitivo regreso a México realizó murales en importantes edificios como el Palacio de Bellas Artes, la Universidad de Guadalajara, el Palacio de Gobierno y el Hospicio Cabañas de Guadalajara. Pese a todo, Orozco nunca abandonó la pintura en pequeño formato, ni la gráfica.

Actualmente el público nacional e internacional puede disfrutar de la obra de José Clemente Orozco que se exhibe en el MUNAL como parte de la exposición XX en el XXI. Colección del Museo Nacional de Arte y en el Museo de Arte Moderno, en la exposición Territorios de la memoria 1985 – 2019.

 

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