- Carmen Saavedra
Tocarte
Somos territorios ajenos
encontrados a través de una mesa
cenando palabras e historias
Ahí
en medio de un diciembre
descubrí esta pausada ternura
esta pulsión de mis manos
hacia tus manos
No hay un antes o un después
sólo esta necesidad del ciego
ese querer escuchar tus otras voces
Curiosidad felina por husmear tu piel
por leer las claves morse de tu epidermis
sin más que eso, que el erizamiento
que el hallazgo
Termina el año y me contento
mientras escribo cartas, manifiestos y poemas
termina el año y trazo puertas a otros mundos
Algún paraíso
Veo el reflejo que dibuja
tu piel sobre la mía
asumo que algún paraíso
existe aquí
Hilvano plegarias
para ti
sólo para ti
para que me alcances
cuando me doy a la fuga
líquida y aérea
Ahora sólo es cuestión
de coincidir
de que el cansancio no me tire
de que tus ganas no se agoten
de que el país no reviente antes del fin
Esto es cierto:
me reconcilio con el universo
cuando atraviesas mi alma
y naufragas dentro de mí