En el corazón de esa zona desalmada del DF (gastronómicamente hablando), la entusiasta gastrónoma Elisa Ochoa y su socia Ximena Galván se aventuraron a proponer y proporcionar una oferta eco-romántica para sus vecinos.
Elisa encontró su plataforma culinaria en casa, a muchos kilómetros de distancia. Puebla de los Ángeles fue la ciudad donde, en compañía de su abuela, vivía las fiestas familiares desde la cocina y en la cocina. Su madre preparaba por costumbre y de manera metódica, el panqué de limón que se esperaba religiosamente todas las semanas para gusto de ella y de sus cuatro hermanos. Las celebraciones durante el año, que obviamente eran varias, se manifestaban en repostería de hasta tres pisos (los de columnas… no) repletas de chocolates a manera de lunetas.
En la vocación de las hornillas, mesas de trabajo y hornos, Elisa encontró su formación en “El Claustro” (quién sabe por qué). Su camino y relaciones gastrónomas la llevaron a “La Troufe”, un exclusivo lugar en la colonia Roma que ofrecía catas, maridajes y ultramarinos y llenaban a los vecinos de la avenida Álvaro Obregón con el mejor Jabugo bellotero, baguettes de jamones finos y pionera en distribuir productos orgánicos en la zona (2001).
Muchos años después, a partir de la idea de que la comida transmite cariño, nació “Tapiela”, un proyecto de apoyo a los productores locales con platillos de temporada y de regreso al origen, donde se procura adquirir los insumos necesarios en el mercado de la Merced con marchantes de tradición; utilizar lácteos de Querétaro, verduras de Topilejo, Heladitos Corazón y hogazas de Pancracia. En el pequeño lugar puedes llevarte una sonrisa al paladar con su Roast Beef casero en un sándwich aderezado con mayonesa hecha en casa de alcaparras y estragón, acompañado de papas García confitadas con aceite de olivo, romero y sal de mar. Además, una excelente ensalada –invención que saliva al escucharse– de cebolla caramelizada al vino tinto, queso camembert, arúgulas, aceitunas negras, jitomate y almendras asadas tocadas sutilmente por una vinagreta de balsámico, que ayudarán a equilibrar el plato fuerte.
Para terminar, puedes elegir entre el famoso y multipublicado pay de manzana o el cheese cake de queso ricota. Si eres de los experimentales, te sentirás extasiado por el crumble de mora azul horneado frutalmente en una tarta de masa quebrada, escarchada por galleta de mantequilla del día y una bola de heladito de vainilla de extractos de nuestra afortunada vaina veracruzana. La selección de tizanas nacionales y café mexicano complementarán perfectamente tu sobremesa.
Las aguas son del día, y van desde pepino con hierbabuena y limón hasta melón con jengibre.
Tres tipos de kirsch y un paquete de 115 pesos te pueden saciar sin remordimiento.
Si das check-in en Foursquare te regalan el café.
¡Come con corazón!
Tapiela: Indianápolis #3, Col. Nápoles,
Benito Juárez.
Esquina Arizona.
Teléfono: 55365784
$150-$200 p/p.