Museo Tamayo Arte Contemporáneo, a partir del 29 de abril al 13 y 20 de agosto
E l Museo Tamayo Arte Contemporáneo alberga desde el pasado 29 de abril las muestras Ceremonia de Claudia Fernández y Quimera de Wilson Díaz.
Quimera, Wilson Díaz (Pitalito, Colombia, 1963) ofrece un recorrido musical por su país natal entre los años sesenta y noventa, con discos de acetato de 33, 45 y 78 revoluciones por minuto.
El trabajo de Díaz indaga en la situación sociopolítica de la nación sudamericana a través de la investigación y el tratamiento de imágenes en circulación constante.
Interesado principalmente en las formas de comunicación visual, así como en los vínculos entre individuos y comunidades, el artista toma estrategias propias de la publicidad, impresiones periodísticas y la señalética urbana, y las reutiliza en obras a menudo cargadas de humor, mediante prácticas tan diversas como la música, el performance, el dibujo, la pintura, el video o la fotografía. Asimismo, desentrama los discursos detrás de las imágenes apropiadas para dejar entrever los distintos agentes sociales, económicos y políticos con los que se relacionan.
Quimera está integrada por objetos de la colección que el artista reúne desde 2008, derivados de la propaganda mediática de sectores que tienen un impacto directo en procesos históricos en Colombia. El elemento central de la exposición es la mencionada serie de discos de vinilo, que sobresale por sus contenidos y orígenes ideológicos muy marcados.
El creador también ha producido una veintena de pinturas que replican el formato de las portadas de los álbumes. A través de la repetición de la forma, realiza con su propia obra el mismo proceso de recirculación y apropiación de imágenes, como un ejercicio reflexivo constante en su práctica.
Por otra parte, Claudia Fernández, desde la década de los noventa, ha examinado el legado de objetos tradicionales mexicanos y su asimilación en diversos ámbitos culturales. En Ceremonia utiliza técnicas artesanales específicas para descontextualizarlos a través de nuevas piezas que proponen un lenguaje alterno y apuntan hacia el papel social de dichas prácticas.
Su investigación en este contexto la ha llevado a coleccionar una gran gama de objetos elaborados a mano y manifestaciones de arte popular representativas de diversas zonas del país. Este acervo ejemplifica diferentes modos de producción que revelan los sistemas sociales y económicos que prevalecen en distintas regiones de México, al tiempo que reflejan cómo una comunidad puede forjarse a partir del conjunto de significados y propósitos compartidos surgidos de sus prácticas cotidianas.
Ceremonia es un ejercicio expositivo que muestra a las piezas como contenedores de valor histórico y visual para manifestar la habilidad que demanda cada oficio, y las utiliza para crear vínculos entre individuos que devengan en nuevas dinámicas sociales relacionadas con la manera en la que conocemos, difundimos y consumimos este legado.
Quimera puede visitarse hasta el 13 de agosto, y Ceremonia, hasta el 20 de agosto.